El gerente del Marketing de Volkswagen Argentina y jurado de Creative Effectiveness en Cannes Lions, conversó sobre lo que valora al momento de juzgar una pieza, y el valor extra que tiene el hecho de vincularse con colegas y profesionales de distintas áreas de la comunicación de todo el mundo.
En cuanto a sus criterios a la hora de evaluar los casos, Sorrondegui explicó que existen “varios componentes”. En principio, la categoría: el tipo de empresa, servicio o producto que está detrás, “y lo tan fácil o difícil que puede llegar a convencer a alguien de tener su producto cuando a veces no están ‘seteado’ en la cabeza de alguien como para comprar, diría, casi por impulso. Eso me parece rescatable”.
“Después, tomo en cuenta la idea”, agrega, y el hecho de “tratar de encontrar una manera distinta de comunicar algo, de ser eficiente en la utilización del discurso. Ser claro, directo y simple”.
Al momento de hacer un análisis más profundo, expresó que “hay que tratar de entender que no sea ningún caso armado, donde sea difícil verificar que la estrategia e implementación de la idea hayan sido efectivas, o donde se note que la logística es demasiado rebuscada para lograr los resultados que se muestran. Cuando se tiene toda esa sumatoria, después se hace un poco más fácil dejarte sorprender por esos casos”.
A su vez, resalta que una de las condiciones más importantes que se debiera tener “es salirse del defecto profesional de estar vinculado a eso y dejarse sorprender como potencial cliente”.
Sorrondegui opinó que en los últimos años “todos, como consumidores, hemos madurado un montón. Las marcas, si bien históricamente estaban un poco menos atentas a participar o al resultado que tenían sus agencias en eventos como Cannes, hoy le prestan mucha más atención porque se evidencia en la vida de todos los días que hay una fuerte correlación entre las buenas ideas presentadas y premiadas, que luego son implementadas por las marcas, y los resultados en términos comerciales o de retorno sobre la inversión”.
Es en este punto donde “como vamos evolucionando como consumidores, hacemos la inferencia de comunicación inteligente – marca inteligente – consumidor inteligente. Ahí es donde se da que uno más uno es más que dos”.
Más allá de sus expectativas como jurado, Sorrondegui puntualizó la importancia que tiene participar de esta clase de festivales ya que “siempre es interesante estar expuesto a este tipo de circunstancias que permiten vincularse con gente con la que, en el día a día, no hay posibilidad de hacerlo. Por ejemplo, estar en una charla donde probablemente no descubramos demasiadas cosas nuevas, pero sí detalles o pequeñas cosas que nos permitan hacer algunos cambios”.
Justamente es en este tipo de encuentros donde se da un intercambio y realimentación valiosa: “hace poco viaje a Roma, a un festival de medios, y estuve con los CEOs de todas las centrales de medios globales. Y esto es una buena oportunidad desde todo punto de vista: para las empresas anunciantes, vincularse con potenciales soluciones; y para los que tienen que vender, estar con las empresas en las que pueden llevar adelante y vender sus productos. Es un cúmulo de cosas. Y para lo que es el día a día, después de mucho tiempo, cuando se acaban las ideas, estar expuesto a ver lo qué hacen otras categorías y ver de todo eso, qué se puede aplicar para el trabajo diario, siempre es positivo”.